La Palabra de Dios, la Biblia, nos dice que toda la humanidad es culpable de pecado. No hay nadie que sea perfectamente bueno o justo. Esto no significa que no podamos hacer cosas buenas y mostrar bondad humana. Pero sí significa que somos incapaces de agradar a Dios por nuestra cuenta (Romanos 3: 10-12). El hombre fue creado a la imagen de Dios para la gloria de Dios y cuando Dios vio su creación el vio que lo que había hecho era bueno. (Genesis 1:27, Genesis 1:31). Pero el Hombre decidió rebelarse contra Dios y permitió que el pecado se infiltrara como un cancer mortal (Romanos 5:12)